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Hematología

La hematología es la rama de la medicina que estudia los trastornos de la sangre y de los órganos que la producen, como la médula ósea, el bazo y los ganglios linfáticos. Abarca desde anemias leves hasta enfermedades graves como leucemias o alteraciones en la coagulación. Comprender su origen, síntomas y tratamientos es esencial tanto para los pacientes como para los profesionales de la salud. 

En Campus Sanofi, te ofrecemos una guía integral sobre los trastornos hematológicos más frecuentes, su diagnóstico y cómo convivir con ellos, con información clara, confiable y útil para el manejo clínico diario. 

 

¿Qué estudia la hematología y por qué ocurren los trastornos de la sangre? 

La hematología analiza los componentes celulares de la sangre (glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas) así como las proteínas plasmáticas y los factores de coagulación

Los trastornos hematológicos pueden originarse por deficiencias nutricionales (como hierro, vitamina B12 o ácido fólico), alteraciones genéticasenfermedades autoinmunesprocesos infecciosos o cánceres hematológicos

 

Ciertos grupos presentan mayor riesgo, como niños y mujeres en edad fértil (por deficiencia de hierro), adultos mayores (por enfermedades crónicas o mielodisplasias) y personas con antecedentes familiares de coagulopatías o leucemias

Tipos y síntomas de los trastornos hematológicos 

Los trastornos hematológicos se clasifican según el tipo de célula o mecanismo afectado. Algunos de los más frecuentes incluyen: 

  • Anemias: pueden ser ferropénicas, por déficit de B12 o folato, crónicas o hemolíticas. Los síntomas más comunes son fatigapalidezdisnea y taquicardia
  • Neoplasias hematológicas: como leucemias agudas (LLA, LMA)crónicas (LLC, LMC) y linfomas. Se manifiestan con fiebresudoración nocturnapérdida de pesoganglios aumentados o infecciones recurrentes
  • Trastornos de la coagulación: incluyen hemofilia A/B y enfermedad de von Willebrand, caracterizados por sangrados nasales, hematomas o sangrados prolongados tras procedimientos. 
  • Trastornos plaquetarios: como la púrpura trombocitopénica inmune (PTI) o las trombocitopenias secundarias, que pueden causar petequiassangrado menstrual abundante o moretones espontáneos
  • Hemoglobinopatías: entre ellas la drepanocitosis (anemia falciforme) y las talasemias, que producen dolor óseo o abdominalictericia y esplenomegalia
  • Trombosis venosa profunda y tromboembolismo pulmonar (TEV): generan dolor e hinchazón en extremidades o disnea súbita, siendo potencialmente graves si no se tratan a tiempo. 

Reconocer los síntomas tempranos puede evitar complicaciones severas y mejorar el pronóstico de las enfermedades hematológicas. 

 

Diagnóstico y tratamiento en hematología 

El abordaje diagnóstico comienza con una historia clínica detallada y exploración física, seguida de pruebas básicas y específicas: 

  • Biometría hemática completa (BHC): evalúa hemoglobina, volumen corpuscular medio (VCM), plaquetas y leucocitos. 
  • Frotis de sangre periférica: permite observar la morfología de las células sanguíneas. 
  • Estudios bioquímicos: ferritina, vitamina B12, ácido fólico, bilirrubinas, LDH. 
  • Pruebas de coagulación: tiempo de protrombina (TP), tiempo parcial de tromboplastina activado (TTPa). 
  • Pruebas especializadas: electroforesis de hemoglobina, niveles de factores de coagulación, actividad de von Willebrand. 
  • Biopsia de médula ósea: fundamental en casos de leucemia, anemia aplásica o linfoma. 

El tratamiento depende de la causa y la severidad del trastorno: 

  • Anemias: corrección nutricional o manejo de la causa subyacente (pérdida crónica, inflamación, hemólisis). 
  • Coagulopatías: administración de factores de coagulación o agentes antifibrinolíticos y profilaxis antes de procedimientos. 
  • Trombosis: uso de anticoagulantes (heparinas, antagonistas de vitamina K, DOACs) y medidas preventivas. 
  • PTI o trastornos inmunológicos: manejo con corticoides, inmunoglobulinas o inmunomoduladores
  • Neoplasias hematológicas: combinan quimioterapia, terapias dirigidas, inmunoterapia y trasplante hematopoyético, según el tipo y estadio de la enfermedad. 

Este enfoque integral garantiza una atención basada en la evidencia, fortaleciendo la autoridad científica del sitio. 

Vivir con un trastorno hematológico 

Vivir con una enfermedad de la sangre requiere monitoreo constante y educación continua. Algunos consejos clave incluyen: 

  • Adherirse estrictamente al tratamiento y a los controles hematológicos (hemograma, INR o anti-Xa según el caso). 
  • Prevenir sangrados evitando deportes de alto impacto, manteniendo precauciones dentales y utilizando protección adecuada ante caídas. 
  • Mantener una alimentación guiada por especialistas, con suplementación de hierro o vitaminas solo bajo indicación médica. 
  • Vacunarse y prevenir infecciones, especialmente en pacientes con neutropenia o asplenia. 
  • Promover la actividad física moderada, para mejorar la circulación y el bienestar general. 
  • Cuidar la salud emocional: vivir con una enfermedad crónica puede generar ansiedad o miedo, por lo que el apoyo psicológico y los grupos de pacientes son fundamentales. 

En Campus Sanofi, reafirmamos nuestro compromiso con la educación médica continua, ofreciendo recursos, programas y contenidos actualizados sobre hematología y otras áreas terapéuticas clave. 

 

Fuentes de referencia: 

MedlinePlus – Trastornos de la sangre: https://medlineplus.gov/spanish/blooddisorders.html